Rutas de atención y trabajo interdisciplinario, necesarios para reducir conducta suicida en Boyacá.
Tunja, 20 de septiembre de 2017. (OPGB). A través de diferentes charlas con especialistas en el tema, la Secretaría de Salud de Boyacá sensibilizó a la opinión pública y a las instituciones, sobre el impacto social, familiar y humano que tiene la muerte por suicidio, unificando conceptos que contribuyan a la toma de decisiones en el marco preventivo intersectorial de la conducta suicida.
El representante de la Asociación Colombiana de Bipolares, Jorge Arturo Noriega, explicó la importancia de los procesos que se realizan en los grupos de apoyo para personas con algún diagnóstico de trastorno mental y la necesidad de trabajar en un enfoque de derecho, de tratamiento e intervención multidisciplinaria, donde la rehabilitación, basada en comunidad, tenga un peso relevante.
Por su parte, la médica Psiquiatra, Yasmín Sánchez, indicó la importancia de saber detectar de manera temprana los trastornos depresivos y darles el debido manejo interdisciplinario, teniendo en cuenta que es uno de los más comunes en el departamento, en el país y en el mundo y continúa en crecimiento potencial, convirtiéndose en un evento de interés en salud pública; esta intervención se unió al llamado del año 2017, de la Organización Mundial de la Salud “Hablemos de depresión”, que busca mejorar procesos de vigilancia, detección, atención y prevención de esta condición.
Según la directora de Salud Pública de la Secretaría de Salud, Mónica María Londoño, una muerte violenta es muy difícil de aceptar, máxime cuando se trate de un suicidio, pero con acciones tan sencillas como fortalecer los lazos de afecto y los canales de comunicación, especialmente la escucha; y tener la capacidad de identificar una situación de riesgo en una persona potencialmente suicida como por ejemplo estados depresivos, ofrecer y pedir ayuda oportuna, puede contribuir a evitarlo.
“Todos podemos salvar una vida y solo nos toma un minuto”, pero especialmente los profesionales de salud, estamos llamados a ir mucho más de la valoración física para trascender a las emociones de las personas, de tal modo que podamos establecer posibles signos de alarma que puedan derivar en ideaciones o conductas suicidas, que podamos prevenir o manejar”, agregó Londoño.
De esta manera se generó la necesidad de la claridad en las rutas de atención y el trabajo interdisciplinario, en pro de la reducción de la conducta suicida en Boyacá, ya que el tema del suicidio es responsabilidad de la comunidad en general y se deben realizar procesos de sensibilización, prevención, detección y atención contundentes.
El referente de la dimensión de Convivencia Social y Salud Mental, Martín Barrera, hizo un llamado a los medios de comunicación para que sean prudentes a la hora de dar a conocer una noticia de esta naturaleza, ya que en lo posible lo que se quiere es evitar que se repitan este tipo de casos, por ello es importante no contar detalles de la muerte, sino solo registrar el hecho y comunicar que existe la línea 106 o línea de ayuda de la Secretaría de Salud, que cuenta con profesionales dispuestos a escuchar. (Fin/Elsy E. Sarmiento Rincón – Prensa Secretaría de Salud).
Anexo 1: Un Instrumento para profesionales de los medios.
Anexo 2: Prevención del Suicidio.
Oficina Asesora de Comunicaciones y Protocolo
Gobernación de Boyacá.