Teniendo en cuenta que la reducción del riesgo incluye prevención, mitigación y preparación, es importante tener en cuenta este concepto al momento de planear nuestro Simulacro Nacional.
Tunja, 5 de octubre de 2020, (UACP). En el marco del mes de la Reducción del Riesgo de desastres, la Unidad Administrativa Especial de Gestión del Riesgo de Desastres de Boyacá invitan a las administraciones municipales, instituciones, empresas, etc. y comunidad en general, a analizar cada uno de los Planes de gestión del riesgo de desastres y de estrategias de respuesta a emergencias y enfocarlos en la Reducción del Riesgo.
Pero, ¿qué es la Reducción del Riesgo?, “Es un proceso que busca modificar o disminuir las condiciones de riesgo existentes y evitar nuevo riesgo en el territorio a través de medidas de mitigación y prevención que se adoptan con antelación para reducir la amenaza, la exposición y disminuir la vulnerabilidad de las personas, los medios de subsistencia, los bienes, la infraestructura y los recursos ambientales, para evitar o minimizar los daños y pérdidas en caso de producirse los eventos físicos peligrosos. La reducción del riesgo la componen la intervención correctiva del riesgo existente, la intervención prospectiva de nuevo riesgo y la protección financiera” (Art 4 Ley 1523 de 2012), de tal manera que la tarea es evaluar si los riesgos que ya identificamos son los que todavía se tienen o si por el contrario ha cambiado algo dentro de nuestro entorno, es así que después de identificar los riesgos, debemos proponer como reducir este riesgo.
El Simulacro Nacional 2020, es la oportunidad para revisar lo planteado dentro de cada uno de los Planes de gestión del riesgo de desastres y de estrategias de respuesta a emergencias y si las estrategias aportadas en este documento apuntan a la metodología de reducción del riesgo, así pues, prepararse para este ejercicio de simulación no solo es un trabajo de momento, si no es una tarea del día a día.
En el caso de los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo, viene implícito el escuchar a la comunidad frente a lo evidenciado en cada uno de sus territorios y su aporte para mejorar su entorno, pero también es implícito en la comunidad aportar realizando acciones que vayan encaminada a evitar catástrofes.
Este objetivo debe ser de todos y es la oportunidad de mejorar, de tal manera que con este ejercicio encontremos metodologías y estrategias enfocadas a la Reducción del Riesgo. (Fin/ Juana María Quintero/Unidad Administrativa de Comunicaciones y Protocolo UACP).
Gobernación de Boyacá.