Los oficios religiosos y procesiones para recordar la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazareth.
El mundo católico, que en Colombia ocupa el quinto lugar, de seguidores en el orbe, inicia la semana santa, un tiempo para recordar el triduo pascual, es decir la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazareth, momento de oración, redescubrimiento de valores, perdón y reconciliación, más que de francachela, parranda y de exquisitas viandas.
Durante estos días las familias en torno a la mesa, padres e hijos se encuentran y departen sobre la realidad de la vida, para reflexionar sus aciertos, desaciertos y revisar su caminar por el mundo, en procura de la reconciliación personal y colectiva para alcanzar la felicidad.
Son días de fe, reflexión y devoción, que esperan la masiva participación de los feligreses. Es una época para reflexionar, mediante la cual, las históricas lecturas y las tradiciones religiosas, se convierten en una cita con la paz, el recogimiento y la fe, como lo explica el arzobispo de la Arquidiócesis de Tunja, monseñor Luis Augusto Castro Quiroga.
Del sinnúmero de actividades religiosas que se realizan, las procesiones, que conllevan un masivo acompañamiento ciudadano, recuerdan cada uno de los momentos que vivió cristo, aseguran sacerdotes y feligreses. Sacerdote Víctor Guerra y Comunidad de Paipa.
Los días santos permiten a la comunidad como creyentes, mostrar su sentimiento de gratitud al todopoderoso por los favores recibidos. Sergio Tolosa y Jorge Herrera.
Los integrantes de la iglesia indican que la Semana Santa, le permite a la comunidad, como penitentes, realizar actos de contrición y penitencia de sus actuaciones: Monseñor Luis Augusto Castro y Penitentes.
Durante la Semana Santa, según la comunidad, los cargueros cumplen con penitencia la labor de transportar los pasos que recuerdan la vida de Jesús. Monseñor Castro y comunidad.
Por más de dos décadas en Semana Santa, Jorge Herrera y Sergio Tolosa, cargueros del Santo Sepulcro, y Carlos Andrés Hoyos, nazareno de Tunja, aseguran que esta tarea la realizan con fe y sacrificio. Sacerdote Víctor Guerra y Carlos Andrés Hoyos.
Sentir la Semana Santa, es ver pasar en silencio, respeto y devoción, las procesiones; tener abierto el corazón y los ojos de la fe, disponer de tiempo para la reflexión, convertir el evangelio en un estilo de vida, visitar los templos y admirar cada uno de los capítulos de la historia de Jesús, mientras se escuchan los cantos, que año tras año, se dan cita en los rincones de los centros religiosos, razones precisas para saber que, sin duda alguna, los días santos, como los 365 días del año, se deben vivir en familia con fe, tranquilidad, respeto y en paz. Una crónica de José Alberto Paredes Avella, Oficina de Comunicaciones y Protocolo.
Gobernación de Boyacá.
Sonorización: Carlos Ballesteros.